BINGO RAMALLO: DENUNCIAN APROVECHAMIENTO ECONÓMICO, MALTRATO Y MALA ASISTENCIA PARA LA GENTE GRANDE
Vecino de San Nicolás indignado.
Gustavo Romero es un vecino de San Nicolás que a través de su red social Facebook hizo público su descontento y malestar hacia el personal del Bingo Ramallo. Sabido es que el bingo es un lugar visitado en gran medida por gente mayor y, según Gustavo, no reciben la atención esperada y merecida en un lugar de esparcimiento.
En comunicación con nuestro medio, Romero agregó los pormenores que dieron origen a su malestar.
“En el bingo hay maltrato y mala asistencia para la gente grande. Yo lo vi con mis padres cuando los fui a buscar. Sacaron un ticket de $3.000 y llamaron a un asistente porque no salía de la máquina y el asistente les dijo: “Jugá, ¿por $3.000 me hacés llamar?”. Son cosas que molestan. ¿Por qué tienen que gastar todo lo que tienen en esa máquina?, ¿para no molestarlos? Llamás a un asistente y demoran en venir. Vienen y les contestan mal a la gente; siempre con mala gana. Vas a la caja y todos los días en hora pico hay una sola persona y se junta una cola grande. Hacen eso para que la gente se vaya y siga jugando, que no cobre el ticket. Los restitos que te quedan, $400, $500, $700, casualmente no entran en ninguna máquina, el sistema no los toma. Ellos pretenden que los dejen de propina o que los dejen ahí. Comprás un ticket en la caja para jugar y te encontrás con que no ingresa directamente, no lo toma la máquina. Volvés a decirles y pedirles la plata de vuelta y te dicen que no te pueden devolver la plata. Tienen un mal sistema, las máquinas en mal estado y todos hacen oídos sordos; un tal Quique y una tal Mary. Todo es molestia y mala atención. Y la gente vuelve porque es la única salida que tienen cerca”, remarcó Romero.
También agregó: “En cualquier otro bingo o casino de otro lado no te tratan así. Estos chicos están mal acostumbrados. Han despedido a varios, quedan pocos y la atención que brindan es mala. Los jefes también te miran con mala gana, siempre mala actitud. En otros lados te representan un mundito lindo para que te quedes a gastar la plata, te atienden con simpatía y agrado. En Pergamino, Victoria, Rosario te atienden con buena actitud. Este es el único lugar en que eso no pasa. Uno va a divertirse no a que lo traten mal. Es insólito”.
