
Ataque narco. Alerta en todas las cárceles de una provincia por el temor a atentados
ROSARIO.– Todas las cárceles de Santa Fe están en estado de alerta, luego de que anoche se produjera un atentado a balazos contra la Unidad de Detención Nº 3, en Rosario. Dos delincuentes en ...
ROSARIO.– Todas las cárceles de Santa Fe están en estado de alerta, luego de que anoche se produjera un atentado a balazos contra la Unidad de Detención Nº 3, en Rosario. Dos delincuentes en moto pasaron por inmediaciones del penal y dispararon cuatro tiros contra el portón de ingreso. Los atacantes dejaron, además, una bolsa que contenía mensajes amenazantes.
Ante esta situación, el titular del Servicio Penitenciario Provincial, Gabriel Leegstra, anunció que todas las cárceles de Santa Fe “están en estado de alerta” por posibles ataques.
El atentado ocurrió anoche, cerca de las 22, y –según la investigación- fue protagonizado por dos hombres que circulaban en moto y que efectuaron, al menos, cuatro disparos contra el portón ubicado sobre calle Zeballos.
Leegstra sostuvo que el ataque “tendría que ver con una situación interna de un recluso que está alojado en la Unidad 3 o en alguna otra unidad penitenciaria”. El funcionario agregó: “Calculo que tiene que ser una cuestión así. Estamos haciendo nuestras investigaciones internas”.
Las cárceles de la región vienen siendo blancos de atentados permanentes desde los últimos años. El 27 de junio de 2021 se produjo un ataque y fuga de la cárcel de Piñero, que provocó pánico en el gobierno de Santa Fe, y a partir de ese momento comenzaron a trasladarse a los penales federales los líderes de las bandas narco de Rosario, como Esteban Alvarado, René Ungaro y Alan Funes, entre otros.
“Entiendo que es un mensaje que quieren dar por algún tipo de situación que se tendrá que investigar. Tendremos que tomar todas las medidas para que este mensaje no surta el efecto que pretenden, que es generar caos y miedo. Así se impuso una alerta para todo el servicio penitenciario y todas las unidades de la provincia”, apuntó Leegstra.
Rosario se transformó en una ciudad donde todo puede ser blanco de las balas. Los disparos cargan mensajes que no necesitan ningún texto para explicar nada. El pánico supura de manera instantánea y queda como una leyenda inscripta a sangre y fuego.
Desde 2018 los edificios públicos se transformaron en un blanco elegido por los narcos para generar terror, expresar que con poco –un muchacho en moto con una pistola- se puede causar un impacto grande, con la garantía de que en el momento nadie será atrapado. Esta vez le tocó a la cárcel de Rosario, pero antes había sido otro blanco, el edificio de los tribunales federales.
Desde mayo de 2018 se produjeron más de 30 ataques a tiros contra edificios públicos, entre ellos, el Centro de Justicia Penal, el Servicio Penitenciario, la fiscalía de Rosario, el Concejo Municipal y ahora el Distrito Sur, además de las residencias de magistrados. Es una mecánica que se repite ante la escasa prevención.
Entre el viernes 2 de septiembre y el domingo 4 de octubre pasados fue atacado dos veces el Centro Municipal Distrito Sur. Primero rompieron los vidrios a piedras y dejaron mensajes escritos en un papel arrugado y con birome, y dos días más tarde prefirieron disparar y destrozar los blindex del ingreso al edificio.
A la par, el viernes desde una moto dos mujeres arrojaron panfletos con amenazas a los fiscales Pablo Socca y Matías Edery. Los mensajes estaban firmados por “La Mafia”, algo que parece una corporación del miedo y que sus protagonistas cambian.
“Guille Cantero controlá a los gatos, Matias Cesar Pino. Los picudos que están batiendo la cana. Atentamente La mafia”, decían los mensajes intimidatorios.
Antes era el propio líder de Los Monos el que firmaba como La Mafia, pero ahora son sus detractores o competidores los que usan el mismo apelativo, lo que muestra la anarquía del mundo criminal rosarino.
Esta nueva modalidad de poner en la mira de las pistolas a los edificios públicos nació en mayo de 2018, cuando Cantero decidió expresar su bronca en las calles, luego de que la entonces ministra de Seguridad Patricia Bullrich decidiera “sacar” al líder de Los Monos de Santa Fe.
Esta metodología de sembrar terror lo copiaron otros grupos, incluso también el rival de los Cantero, Esteban Alvarado. Lo que aparece como la principal hipótesis del ataque al edificio de la justicia federal de Rosario es que buscó generar conmoción, pánico. Se sabe que con muy poco –un hombre con una pistola- se puede provocar un caos mayor.